Día Internacional de los niños víctimas inocentes de agresión | 4 de junio

 Día internacional de los niños víctimas inocentes de agresión

Niñas, niños y adolescentes en el crimen organizado

Ma. de Lourdes Patiño Barba, Coordinadora de Investigación


El 4 de junio se celebra el Día Internacional de los Niños Víctimas Inocentes de Agresión, fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas que busca sensibilizar a las personas, gobiernos y organizaciones para construir en conjunto lugares seguros para niños, niñas y adolescentes, donde puedan crecer y desarrollarse como personas íntegras, sin el sufrimiento y el dolor que implican las guerras y los conflictos.

En este sentido si bien en México no ha habido una guerra extendida por todo el país desde la revolución, en que toda una generación vivió su infancia y juventud en guerra (la  revolución duró 14 años, de 1910 a 1924). Mi abuela y sus hermanas eran niñas cuando estalló, y en mi infancia alcancé a escucharles historias de intensa y constante zozobra ante la llegada de soldados de uno y otro bando, hambre por la frecuente falta de alimentos -- y porque los pocos que había eran saqueados por los grupos en guerra--, relatos de masacres a pueblos y hogares, de despojos, de violaciones a mujeres como parte del “botín” a repartir, y en muchas ocasiones, muerte por igual para niñas, niños, jóvenes, adultos y ancianos. Las neurociencias han venido a mostrar los profundos y muchas veces permanentes efectos de la violencia tanto física como psicológica en niños, niñas y los adolescentes, que provocan serias limitaciones para su desarrollo presente y futuro.

Muchas personas hemos sido afortunadas de haber vivido una vida sin los atropellos, la agitación y los devastadores efectos en carne propia de la guerra, en que el derecho a la supervivencia, siendo tan básico, se pone en riesgo, al igual que los derechos de una vida digna, libre de violencia, con bienestar. En México se ha venido calificando el combate al crimen organizado como “guerra”, cuyos efectos lamentablemente se han ido extendiendo silenciosa, pero sostenidamente en las últimas décadas, alcanzando los números mayores en los últimos años.

El análisis de la niñez y la adolescencia en contextos de violencia y criminalidad es una problemática social de gran complejidad, que requiere un abordaje desde el enfoque de derechos humanos (CDH, 2019), ya que la meta no sólo es conservar la vida, pues las guerras y los fenómenos de criminalidad, como la llamada “guerra contra el crimen organizado” vulneran el derecho a la vida e integridad personal; el derecho a la educación, a la recreación, al ocio, al juego y a la cultura; vulnera también el derecho a la libertad personal, a la seguridad, a la libertad de circulación y residencia; y el derecho a la salud. 

El crimen organizado transnacional es un término legal que se superpone a otros términos sociológicos como el de la mafia o las bandas. Jurídicamente, el atributo de “transnacional” representa el reconocimiento de que determinadas acciones contrarias a la ley penal se ejecutan en conexión con los mercados ilícitos internacionales. Por ello, el crimen organizado no se considera un fenómeno estrictamente local (CDH, 2019).

El crimen organizado no sólo incluye el tráfico de drogas de cualquier tipo, sino también el robo de automóviles, materias primas, piratería y tráfico de personas (para venta de órganos o explotación sexual), que implica la captación, el transporte, el traslado, la acogida o la recepción de personas, recurriendo a la amenaza o al uso de la fuerza u otras formas de coacción, usando el rapto, fraude, engaño, el abuso de poder o de una situación de vulnerabilidad, o a la concepción o recepción de pagos o beneficios para obtener el consentimiento de una persona que tenga autoridad sobre otra, con fines de explotación.  El crimen organizado y las bandas criminales reclutan a diversas personas por medio de la fuerza para lograr los fines que tiene el grupo delictivo (CDH, 2019).

Niñas, niños y adolescentes no quedan ajenos ni exentos de sufrir los embates del fenómeno social del crimen organizado, además, hay un efecto delictivo diferenciado para hombres y mujeres, como lo muestran las cifras de delitos registrados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP, 2021):

Figura 1. Delitos contra NNA de enero 2015 a abril 2021.

Fuente: Elaboración propia a partir de datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública

En los últimos siete años los niños y adolescentes hombres han sufrido más homicidios, secuestros y lesiones; en cambio las niñas y mujeres jóvenes han sufrido más la trata de personas (relacionada con la explotación sexual, que de acuerdo al estudio de la CDH en 2019, es la tercera actividad más lucrativa para las organizaciones criminales, después del tráfico de drogas y armas) y de corrupción a menores, además, niñas y adolescentes mujeres son casi la totalidad de víctimas de los raptos reportados en personas menores de 17 años desde 2015.

De enero 2015 a abril 2021 se registraron 158,497 delitos contra niñas, niños y adolescentes, que constituyen el 8% del total de casos documentados por el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (2021), pero la cifra podría ser mayor, ya que los casos en que no se especificó o identificó la edad de las víctimas representan el 30.6% del millón 991 mil 810 delitos reportados en México en los últimos siete años.

Adicionalmente a ser víctimas directas de delitos, de acuerdo a la Comisión de Derechos Humanos (2019) muchas niñas, niños y adolescentes de ambos sexos son reclutados por las bandas criminales para que sean partícipes de sus procesos delictivos, en tareas que van desde la fabricación de pequeñas y ligeras municiones y armas que son fáciles de transportar y de utilizar; también les reclutan para desempeñar funciones de apoyo, como ser cocineros, cargadores, mensajeros, espías, o incluso combatientes.

Guerra franca como la que se vive ahora entre Hamas y el Estado de Israel, o silenciosa como la que se tiene con el crimen organizado nos debe ocupar tiempo, reflexiones y acciones tanto a gobiernos y organizaciones como a ciudadanas y ciudadanos para juntos salvaguardar los derechos a una vida digna, que no vulnere la vida presente y futura de niñas, niños y adolescentes.

 

Referencias bibliográficas:

Comisión Nacional de los Derechos Humanos (2019). Estudio Niñas, niños y adolescentes víctimas del crimen organizado en México. 1ª. Edición. Ciudad de México. Noviembre.

Organización de la Naciones Unidas (2021). Día Internacional de los Niños Víctimas Inocentes de Agresión. Recuperado desde: https://www.un.org/es/observances/child-victim-day

Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (2021, abril). Datos de incidencia delictiva. Recuperado desde: https://www.gob.mx/sesnsp/acciones-y-programas/datos-abiertos-de-incidencia-delictiva

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