Ser mujer adulta, adolescente o niña en México, implica estar en riesgo.
León, Guanajuato, marzo 2019.
Ser mujer adulta, adolescente o niña en México, implica estar en riesgo.
El Centro de Promoción de los
Derechos Humanos de las Niñas, Niños y Adolescentes en Guanajuato NIMA, alerta
sobre los altos índices de feminicidios
contra las mujeres en nuestro país. El
2018 ha sido uno de los años más violentos para la vida de las mujeres adultas
y las niñas mexicanas. Mientras que en el 2017 se registraron al menos 3 mil
272 casos, para el año pasado se reportaron 3 mil 580, incrementando un 9.41%
de acuerdo con el Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad
Pública (SESNSP)[1]. De
acuerdo con la misma fuente, Guanajuato fue la entidad en la que se registró un
mayor incremento del 90.64% respecto con el año antepasado; en 2017 se
registraron 171 casos mientras que para el 2018 fue de 326 casos.
En contexto con los últimos
feminicidios de niñas y adolescentes en el país, la Red por los Derechos de la
Infancia (Redim), ha señalado que el asesinato contra mujeres de 0 a 17 años
incrementó al menos un 32.30% en 2018, respecto a la cifra de 2017. Si la
víctima tiene entre 15 y 17 años, tiene un 30% más de riesgo, de ser víctima de
feminicidio.
El feminicidio es una violación grave
a los derechos de las mujeres, frente a la cual el Estado mexicano ha sido
omiso y cómplice para erradicar esta violencia, aunado a la legitimidad social
y cultural que se reproduce en una sociedad machista como la mexicana.
El Estado mexicano y la sociedad en
general debemos responsabilizarnos de estas formas de violencia, las cuales no
son ajenas a nuestro contexto, sino por el contrario, reproducidas, sostenidas
y avaladas por un estado omiso ante las violaciones a los derechos humanos y
una sociedad que se mantiene a la expectativa, sin actuar ante la clara
evidencia de que “a las mujeres nos están matando”
En este sentido, el Centro de
Promoción de los Derechos Humanos de niñas, niños y Adolescentes, exigimos al
Estado mexicano y en particular al Guanajuatense:
·
Frenar
las prácticas de impunidad que crean y
reproducen las condiciones para que matar a una niña, adolescente y
mujer adulta, no sea castigado.
·
Al
Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes, activar las dependencias que lo conforman, con
acciones claras y puntuales en materia de educación, salud, economía, seguridad
etc.
·
Cumplir
con los estándares de la Convención de los Derechos del Niño, la Convención
para la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación contra la Mujer
(CEDAW) en las dependencias responsables de proteger los derechos de las niñas
y adolescentes, como los son Ministerios Públicos, Procuradurías de Protección
Integral de Niñas, Niños y Adolescentes, Procuraduría General de Justicia del
Estado de Guanajuato.
Instamos a la sociedad en general a
construir formas nuevas de relaciones sin violencia, a no cerrar los ojos ante
los feminicidios, a denunciar, a exigir, a solidarizarnos como estrategia de
lucha contra este sistema de muerte, en el que las mujeres y las niñas somos
objeto y objetivo de control.
Alto al feminicidio de niñas y adolescentes
mujeres.
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